Norte Sostenible

Lobitos vuelve a teñirse de petróleo: segundo derrame en menos de 7 meses

En menos de siete meses, un segundo derrame de petróleo en Lobitos, provincia de Talara (Piura), ha generado alarma entre habitantes, pescadores, padres de familia y autoridades locales. Este nuevo incidente, ocurrido el 7 de julio en el pozo 383 del Lote VI, operado por Petroperú, contaminó aproximadamente 500 metros lineales de quebradas y caminos hacia playas como Las Capullanas y Punta Lobos B, aunque los ciudadanos locales señalan que la afectación es mayor.

La empresa estatal activó su plan de contingencia e informó haber logrado un 95 % de avance en la limpieza, a pesar de que pobladores impidieron inicialmente el ingreso de maquinaria pesada, alegando la necesidad de preservar la evidencia de impacto hasta que llegaran las autoridades ambientales para constatar el impacto en su totalidad. No obstante, pescadores y residentes señalaron que el crudo aún está presente en el terreno y las orillas, rechazando las versiones oficiales. Indican que Petroperú solo ha enterrado el crudo en algunas zonas del derrame.

El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) y Osinergmin se trasladaron de inmediato al lugar para supervisar la respuesta ambiental de Petroperú, verificar la activación del plan y evaluar los daños al suelo y ecosistema. Edward Liñan Flores, representante de OEFA Piura, estimó la afectación en al menos 500 metros, aunque aún se trata de datos preliminares.

Según OEFA, el derrame alcanzó más de 500 metros lineales camino a la playa Las Capullanas. Foto: Jesús Espinoza/ Actualidad Ambiental.

La comunidad de Lobitos, acostumbrada a este tipo de desastres, reaccionó con fuerte preocupación. El alcalde de Lobitos, Ricardo Bancayán, calificó el hecho como un “nuevo ataque al ecosistema y la salud pública”. Denunció que el fuerte olor obligó a suspender las clases escolares y lamentó que Petroperú «se burla de nuestro pueblo», tras ignorar una reunión en Lima convocada para atender el derrame anterior ocurrido el 20 de diciembre de 2024.

El burgomaestre dijo con firmeza: “Petroperú se burla de nuestro pueblo”, y agregó que los escolares han dejado de asistir a clases por los gases y olor a crudo en la zona. Los ciudadanos, indignados, llegaron esta mañana hasta la zona del desastre para verificar las labores de limpieza por parte de Petroperú. Además, aprovecharon la presencia de la prensa, para denunciar los constantes derrames por parte de Petroperú, entidad que se niega a indemnizarlos por la emergencia ambiental del año pasado.

Fiscalía Ambiental abre investigación

Ante la emergencia ambiental, la Policía, Osinerming, OEFA y autoridades locales fueron hasta la zona para constatar los hechos y los daños causados por este derrame. De igual manera, personal de la Fiscalía Ambiental de Sullana, encabezados por el fiscal Néstor Sosa, llegaron a la zona para evaluar los daños e indagar en las causas de este desastre ambiental.

En diálogo con Norte Sostenible, el fiscal Néstor Sosa, dijo que ya prepara un informe sobre lo ocurrido y que, de todas maneras, se le iniciará una investigación preliminar contra Petroperú por el presunto delito de contaminación ambiental. «Es un nuevo proceso, con nuevos plazos y se tendrá que determinar la respponsabilidad de Petroperú en este incidente. Ya estamos en la zona evaluando los daños», dijo.

Los vecinos pidieron que Petroperú repare los daños causados y que los indemnice por el desastre del año pasado. Foto: Jesús Espinoza/ Actualidad Ambiental.-

Asimismo, agregó que respecto al derrame ocurrido en diciembre del año pasado, se está a la espera del peritaje realizado por Osinerming para determinar la causa del desastre que afectó Lobitos y varias de sus playas. «De todas maneras vamos a formalizar investigación preparatoria contra Petroperú por el delito de contaminación ambiental, porque todo apunta a eso. Estamos dentro del plazo de 8 meses de investigación preliminar, pero estamos a la espera de los resultados de Osinerming para formalizar la investigación», comentó Sosa a Norte Sostenible.

Los impactos del desastre que aún no se superan

Este segundo derrame en menos de siete meses revive la preocupación de la comunidad tras el incidente de diciembre de 2024, que afectó seis playas y golpeó duramente el turismo y la pesca artesanal. Los vecinos y autoridades locales exigen una investigación exhaustiva por parte del OEFA, Osinergmin y la Fiscalía Ambiental, así como sanciones ejemplares.

Además de afectar el entorno natural, el derrame está causando trastornos en la vida cotidiana de Lobitos. El alcalde pidió al Estado actuar con responsabilidad y urgencia: “Estamos caminando con nuestro pueblo para que esto no quede impune”, dijo.

Lo más grave, sin embargo, es que Petroperú no ha cumplido con sus compromisos tras ese derrame de diciembre del 2024. «No ha cumplido con indemnizar a la población, que sufrió por la caída del turismo, el comercio y toda la actividad aquí en el distrito. No quiere pagar, por ese motivo es casi seguro que iremos a paro indefinido», contó a Norte Sostenible Quenny Carreño, del Frente de Defensa de los Intereses de Lobitos. La población espera justicia por el daño causado por el petróleo.

Foto de portada: Jesús Espinoza/ Actualidad Ambiental

A pesar de los discursos oficiales sobre responsabilidad ambiental, Lobitos vuelve a ser víctima de un derrame de petróleo. Esta vez, el crudo escapó del pozo 383 del Lote VI, operado por Petroperú, y afectó quebradas, caminos hacia la playa y obligó a suspender las clases escolares por el fuerte olor. No es un hecho aislado: en diciembre de 2024, otro derrame impactó playas, mató fauna marina y paralizó el turismo. Hoy, con la confianza fracturada, el Estado promete supervisión mientras los vecinos exigen sanciones, justicia ambiental y, sobre todo, que esto no vuelva a repetirse. ¿Cuántas veces más debe mancharse Lobitos?

8 julio, 2025