Norte Sostenible

Ocho años después del Niño costero: muchas excusas y pocas obras

Lo primero que uno piensa cuando llega a Piura es que la ciudad del eterno calor se paralizó en el tiempo. Parece que las lluvias de El Niño costero del 2017 hubieran ocurrido ayer, a juzgar por las pistas del centro de la ciudad o los enormes aniegos que se forman en las cuencas ciegas cada vez que llueve. Han pasado ocho años desde aquella catástrofe, pero la región sigue vulnerable a inundaciones, a pesar de las promesas que hicieron políticos y autoridades de turno. La aplaudida reconstrucción sigue esperando en el norte peruano. 

Después de la emergencia por el Niño costero del 2017 se diseñó el plan de la reconstrucción, a cargo de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios (ARCC), que se encargaría de ejecutar obras y trabajos de prevención necesarios para evitar futuras inundaciones en 13 regiones del país: Áncash, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Huancavelica, Ica, Junín, La Libertad, Lambayeque, Lima, Loreto, Piura y Tumbes. 

El costo de implementar dicho plan era de más de S/ 50 mil millones e incluía cuatro componentes: soluciones de vivienda, fortalecimiento de capacidades, reconstrucción de infraestructura dañada y construcción de obras de prevención. En este último componente destacaban las soluciones integrales y el manejo de cuencas y ríos en el norte peruano. Sin embargo, tras seis años de funcionamiento, la ARCC solo concluyó con el 73% de las obras proyectadas. 

Los proyectos pendientes pasaron en 2024 a manos de la Autoridad Nacional de Infraestructura (ANIN), que desde que tomó la posta de la reconstrucción solo ha avanzado el 40% de lo encomendado, según documentos a los que accedimos mediante la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública. Los sectores en los que menos se ha progresado es en salud y soluciones integrales, que se refiere a proyectos para evitar las inundaciones de las ciudades cuando llueva. En otras palabras: ahora mismo las ciudades del norte peruano siguen vulnerables ante las lluvias intensas y así lo hemos comprobado con las precipitaciones de este verano. 

Ciudades vulnerables e inundadas

La cartera de infraestructura de la ANIN está conformada por 212 proyectos, de los cuales, 204 fueron transferidos por la extinta ARCC y 8 son proyectos por delegación directa a la institución adscrita a la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM). De los proyectos heredados de ARCC, 76 corresponden al sector Educación por un valor de S/ 3,735 millones. En la actualidad, 68 de esos proyectos ya se culminaron; y quedan pendientes 8. 

De los colegios que aún no concluyen, 7 se localizan en la región Áncash y 1 en Piura, ubicado en el distrito de San Cristo, en la provincia de Sechura. Esta institución educativa, que aún no es recepcionada, consiguió su viabilidad por la suma de S/ 20 millones, pero ha terminado costando casi S/ 91 millones, tras retrasos, paralizaciones y diversos problemas con la contratista y el expediente técnico. 

Asimismo, en el sector Salud, ANIN tiene a su cargo 20 proyectos de construcción y  modernización de establecimientos de salud por un monto de S/ 5,572 millones. De esa cifra solo la mitad han concluido su ejecución física. Todavía está pendiente de finalizar su ejecución física 6 establecimientos de salud en Áncash, 2 en La Libertad, 1 en Piura y 1 en Lambayeque. 

En cuanto a las soluciones integrales para evitar inundaciones en las ciudades vulnerables de la costa peruana, solo 7 proyectos han terminado su ejecución física. Quedan pendientes 101 obras, entre las que se incluyen los drenajes pluviales de Piura, Chiclayo, Trujillo; así como la gestión de los ríos de esas mismas ciudades, que son las más golpeadas por la naturaleza cuando llueve. En este sector la inversión es de S/ 22,284 millones de soles. 

“Las soluciones integrales son una necesidad inminente, primero por el cambio climático y segundo porque tenemos que construir ciudades resilientes, resistentes justamente y adaptadas al cambio climático. No se pueden fraccionar y atomizar los proyectos, se debe pensar en la gestión integral”, dijo a Norte Sostenible Amalia Moreno, exdirectora de la ARCC. 

La exjefe de ARCC, Amalia Moreno, recomendó que las obras que se realicen deben estar vinculadas al plan integral de manejo del río Piura; no deben ser fraccionadas o solitarias. Foto: Sebastián Castañeda/ Norte Sostenible.

Soluciones integrales: la larga espera 

En 2017, cuando las ciudades del norte peruano se inundaron por las intensas lluvias de El Niño costero, se expuso de nuevo la vulnerabilidad del territorio debido a la falta de drenaje pluvial en las ciudades y a una correcta gestión integral y manejo de los ríos. Por ese motivo, la ARCC prometió obras de prevención destinadas a evitar futuras inundaciones en el país. Sin embargo, después de ocho largos años todas las ciudades siguen igual de vulnerables a eventos climáticos. 

De hecho, hasta la fecha apenas siete proyectos de soluciones integrales han concluido en las regiones de Huancavelica (2), Ica (2), Tumbes (2) y La Libertad (1). En el caso de Tumbes se trata del proyecto de defensas ribereñas del río Tumbes, en las quebradas Corrales y La Jardina. Allí se construyeron diques para evitar las inundaciones de ambos sectores. Sin embargo, en marzo de este año se desbordó el río Tumbes y causó inundaciones en toda la región. Es decir, la región continúa vulnerable. 

En La Libertad se concluyó en enero de este año con las obras en la Quebrada El León, cuyo propósito era proteger a la ciudad de futuras inundaciones. Sin embargo, no se cumplió el objetivo, pues dos meses después la ciudad se inundó otra vez, como en 2017, y apenas con lluvias de trasvase, como informaron medios locales. Por su parte, en Huancavelica se concluyeron los proyectos contra deslizamientos y derrumbes en las localidades de Huachos, Huajintay, Huamatambo y las localidades Tantará, Nuevo Amanecer, Buena Vista y Yauritambo.

Por último, en Ica se terminaron las obras en las localidades de El Carmen, Seca y Puerta Blanca; y en los tramos críticos de los ríos Chico y Matagente. No obstante, las recientes lluvias de este verano nos confirmaron que nuestro país sigue expuesto a los efectos de las precipitaciones y seguimos sin ser ciudades resilientes y sostenibles. 

En este contexto, el caso de Piura es emblemático, pues tras ocho años de la peor inundación de nuestra historia, aún seguimos desprotegidos; y lo peor es que el plan maestro para el control de inundaciones y drenaje pluvial de Piura, Veintiséis de Octubre y Castilla que la ARCC concluyó en el 18 de noviembre de 2022, no fue utilizado ni implementado. En enero de este año, ANIN dejó de lado dicho documento debido a que “existirían otras alternativas para la ejecución de los estudios de pre inversión más rentables y de menores plazos”.

Al respecto, Ronald Ruiz Chapilliquén, miembro del Colegio de Ingenieros de Piura y experto en Gestión Ambiental, dijo a Norte Sostenible que “el Perú ha perdido 584 millones de soles en un plan que nunca salió”. Según el experto, ya existía un plan para intervenir el río Piura y evitar inundarnos antes del 2017. Entre 2002 y 2003, especialistas locales junto a la cooperación alemana (GIZ) diseñaron una propuesta clara: intervenir la cuenca alta del río —la zona de causalidad— para evitar que enormes volúmenes de agua lleguen al centro de la ciudad. Para ello, plantearon la construcción de polders (espacios de escape para el agua), reservorios satélites y reforestación en zonas clave de las cuencas altas.

“El Perú ha perdido 584 millones de soles en un plan [del río Piura] que nunca salió”, dijo Ronadl Ruiz Chapilliquén.

Entre las propuestas que plantea también Amalia Moreno, exjefa de la ARCC, destaca la necesidad urgente de elaborar un estudio de preinversión completo e integral antes de ejecutar las obras en el río Piura. “Este estudio debería demorar, por lo menos, dos años; y deben respetarse los plazos”, dijo. Al respecto, ANIN informó recientemente que están en proceso de elaboración los estudios de preinversión del drenaje de la ciudad de Piura y del control de inundaciones del río Piura. 

No obstante, para Ruiz Chapilliquén, desde 2003 ya se sabía qué hacer para evitar inundarnos, lamentablemente faltó voluntad política para implementar ese plan. Luego, tras el desastre del Niño Costero, en abril del 2017, esta propuesta fue actualizada y formalizada, con respaldo técnico y ordenanzas regionales que la declararon de prioridad. La ARCC la acogió como referencia. Sin embargo, los avances se detuvieron pronto.

Norte Sostenible solicitó una entrevista con algún representante de ANIN para conocer los avances de los proyectos a su cargo, pero a pesar de que el área de Comunicaciones nos prometió coordinar una cita, hasta el cierre de este artículo no se concretó. 

El río Piura sigue esperando una gestión integral del río Piura, que incluya el control de inundaciones y el drenaje de la ciudad de forma integral. Foto: Sebastián Castañeda/ Norte Sostenible.

El caso Piura: un drenaje cuestionado 

A pesar de que aún no se concluye el perfil de preinversión del drenaje pluvial de la ciudad de Piura, a cargo de ANIN, el Gobierno Regional ejecutará la obra del drenaje del centro histórico de Piura y la reconstrucción de pistas por más de S/ 100 millones. El proyecto carece de consenso social y ha sido duramente criticado porque afecta la zona monumental de la primera ciudad fundada por los españoles. Además, atenta contra la flora del Parque Tres Culturas; y para los especialistas no es la mejor solución a la inundación en este sector. 

La obra ha sido convocada de nuevo, tras una primera anulación realizada por el Organismo Especializado para las Contrataciones Públicas Eficientes (ex OSCE) debido a observaciones en el proceso. El consorcio ganador se conocerá el próximo 23 de mayo; aunque este viernes los vecinos del centro de Piura y sociedad civil realizarán un foro para abordar otras alternativas de solución. Al evento ha sido invitado el gobernador regional, Luis Neyra, quien hasta ahora se ha mostrado cerrado al diálogo con los vecinos.  

Guillermo Burneo, dirigente y vecino del centro de Piura, dijo que el Gobierno Regional y la Municipalidad de Piura descartaron el estudio de perfil para el drenaje de Piura. “De una simple ficha técnica se saltaron a elaborar el expediente técnico. O sea, en vez de proceder secuencialmente Ficha técnica- estudio de Perfil- Expediente Técnico, que es lo que corresponde de acuerdo a la normativa del MEF”, observó.

Los vecinos de Piura buscan salvaguardar la zona monumental del centro de Piura; y por eso solicitan dialogar con el gobernador regional. Foto: Norte Sostenible.

Pero Amalia Moreno va más allá y advierte que para ejecutar el drenaje de Piura se debe tener el estudio integral y, además, no se puede fraccionar o hacer por partes. “Hay que averiguar bien qué se pretende solucionar con esos casi S/ 120 millones y con qué guía, con qué plan se pretende ejecutar, porque todo debe estar amarrado al plan integral. Además, es muy difícil imponerle a la ciudadanía proyectos, porque uno puede sacar a proceso y cuando ya estás en plena ejecución la gente se opone. Eso es lo que le ha pasado muchísimas veces”, indicó.

El tema de fondo y que preocupa a vecinos y sociedad civil es la poca apertura por parte del Gobierno Regional de Piura para dialogar con los vecinos (quienes le han pedido una audiencia pública al gobernador) y con los colegios profesionales de Arquitectos e Ingenieros, instituciones que también han observado dicho proyecto y lo consideran “inviable”. 

Foto de portada: Un grupo de personas atraviesa una quebrada en Morropón, región Piura, en el verano del 2023. Crédito: Sebastián Castañeda/ Norte Sostenible

Las lluvias usuales de este verano volvieron a desnudar las vulnerabilidades de las ciudades del norte del Perú, que hace ocho años se inundaron por el Niño costero. Desde entonces, y a pesar de las promesas de las autoridades de turno, siguen vulnerables y sin soluciones definitivas. La ANIN aún no culmina las obras de prevención para evitar que localidades como Piura, Tumbes, Lambayeque o La Libertad se inunden cada vez que llueve. Apenas ha avanzado el 40% de las obras a su cargo.

16 mayo, 2025