En medio de la intensa crisis hídrica que azota a la región Piura, más de 5 mil pobladores de Villa La Legua, en Piura, se encuentran indignados debido a que el empresario piurano Carlos Rodríguez Arámbulo ha construido un grifo en la zona y ahora pretende conectar su sistema contraincendios a la deficiente red pública de agua potable. Los moradores denunciaron que apenas reciben dos horas de agua potable y de manera interdiaria, pero podrían quedarse sin el escaso recurso si es que Rodríguez logra su objetivo.
Alertados por el ingreso de maquinaria pesada, los vecinos salieron de sus casas y llegaron hasta el lugar donde se ha construido el grifo que está casi listo para iniciar sus operaciones. Allí pidieron a los obreros de Rodríguez que paralicen la instalación de una tubería de 4 pulgadas que iban a conectar desde la red pública de agua potable al sistema contraincendios del negocio.
“Nosotros solo tenemos agua de forma interdiaria y por dos horas, pero ahora nos vamos a quedar sin agua porque mire las tuberías que están colocando para el grifo. No es justo, no lo vamos a permitir, vamos a defender nuestros derechos”, dijo Juana Zapata Sullón, quien vive al costado del grifo.
Otro de los moradores, Juan Timaná Timaná, indicó que esta es una grave vulneración a los derechos de acceso al agua potable que tienen los residentes de La Legua. “No se puede privilegiar un negocio, en este caso el grifo, para que nos dejen sin agua a nosotros. No vamos a permitir que se conecten a la red pública”, enfatizó.
Grifo sin autorización para conectarse a la red pública
El presidente de la Junta Administradora de Servicios de Saneamiento (JASS) de Villa La Legua, Ever Ocas, le dijo a Norte Sostenible que fue Maco Rodríguez, padre de Carlos Rodríguez, quien le pidió una autorización para que conecte el sistema contraincendios del grifo a la red pública. Sin embargo, el directivo le negó dicha solicitud.
“Estamos en plena crisis hídrica, el pozo subterráneo de La Legua se está secando y nosotros privilegiamos el uso doméstico, no el industrial. El señor Maco Rodríguez [padre de Carlos Rodríguez] me pidió que lo apoye para que pase la supervisión de Osinergmin, pero yo le dije que no”, contó Ocas.
Añadió que Maco Rodríguez le pidió a Ocas que le extienda un documento donde señale que en Villa La Legua hay agua potable las 24 horas, pues es una exigencia de Osinergmin para los sistemas contraincendios en los grifos. De hecho, la norma señala que para inscribir un grifo en el registro de hidrocarburos “deberán presentar un documento emitido por la empresa de saneamiento de la localidad que acredite el abastecimiento constante de la red pública de agua”.
Sin embargo, Ocas se negó y le reiteró que no le brindaría la autorización para conectarse a la red pública porque estamos en crisis hídrica y el servicio es muy deficiente. “Solo brindamos agua potable interdiaria, durante 2 horas, porque el pozo se está secando. Nos estamos quedando sin agua, porque el pozo tiene más de 30 años y se ha reducido su rendimiento”, explicó.
Por su parte, Carlos Rodríguez —quien llegó a la zona y conversó con los moradores— comentó que es falso que el grifo los dejará sin agua. “Estos hidrantes no se van a utilizar. Esto [los hidrantes] estarán conectados allí, pero no se van a usar. Sino que me obliga Osinergmin, es una norma”, argumentó. No obstante, es importante subrayar que los hidrantes tienen como finalidad abastecer de agua a los bomberos en caso de incendios en un grifo. Por eso se exige que estén conectados a sistemas de agua que funcionen las 24 horas y cuenten con buena presión.
Millonaria obra de agua abandonada hace 7 años
Al igual que otros pueblos en Piura, que durante décadas esperan mejoras en el servicio de agua potable, Villa La Legua enfrenta serias restricciones de agua potable debido al estrés hídrico. Una de las alternativas para superar ese problema era el proyecto de agua y alcantarillado para 11 mil habitantes de los pueblos de La Legua, San Jacinto, Palo Parado, Buenos Aires y Los Olivos, todos ubicados en la margen derecha del río Piura. Sin embargo, a 7 años de su inicio la obra de casi S/ 60 millones está abandonada, pues la contratista se encuentra en arbitraje con la Municipalidad Distrital de Catacaos.
De acuerdo con Inviertepe, la obra tiene una ejecución física de 57% y una ejecución financiera de 92.5%. El gobierno central realiza una peritaje para financiar el saldo de obra, pero aún es una opción muy lejana, según las autoridades locales. “Sabemos que va a demorar, lo mejor es ejecutarlo por etapas, estamos impulsando esta propuesta”, dijo Ocas.
Mientras tanto, agregó, que es importante cuidar el poco recurso que existe actualmente. “Este pozo se instaló con una capacidad de 300 familias, ahora son más de 1,500. Por eso es que tenemos poca agua y hay que cuidarla. Nosotros seremos firmes en defender el agua potable para uso doméstico”, indicó.
