Por: Analí Valencia
Una vez más, Piura —la histórica región azotada por el dengue— enfrenta esta enfermedad con serias carencias: poco presupuesto, falta de personal médico y centros de salud desabastecidos. ¿El resultado? En lo que va del año es la tercera región con más casos de dengue en el país, solo detrás de Loreto y San Martín. Pero los pronósticos no son alentadores, pues la región norteña enfrenta un escenario crítico de lluvias que podrían disparar los casos.
De acuerdo con la Sala Epidemiológica del Ministerio de Salud (Minsa), Piura acumula 1,377 casos de dengue en lo que va del año. Las provincias más afectadas con esta enfermedad causada por el Aedes Aegypti son Piura, con 643 casos, Sullana con 386 y Paita con 93. A fines del año pasado, el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC) del Minsa lanzó una alerta epidemiológica por el rápido incremento de casos, sobre todo en la costa y selva peruana.
En aquel documento, además, se señala que para este 2025 Piura sería una de las regiones con más casos de dengue: podrían aumentar en la tercera o cuarta semana de marzo y alcanzarían su pico más alto en la segunda semana de mayo. ¿La razón? la crisis hídrica que enfrenta la región y las enormes brechas en el acceso al agua potable por parte de la población. El año pasado, se registró el pico de casos en la semana epidemiológica 14, es decir, a mediados de abril.
Sumado a eso, también sobresale el poco presupuesto que recibe la región para enfrentar una epidemia como el dengue. El año pasado, la Dirección Regional de Salud manejó S/ 20 millones para combatir las enfermedades metaxénicas, entre las que se encuentra el dengue. Sin embargo, este 2025 solo ha recibido, hasta el momento, S/ 3.3 millones de un total de S/ 15 millones que se tiene proyectado transferir.
Otro factor: las lluvias en el norte
La vulnerabilidad de la región Piura se agrava debido al contexto actual de lluvias y los pronósticos del Senamhi que señalan que para marzo se prevén lluvias por encima de lo normal en la costa norte, con especial incidencia en los departamentos de Piura y Tumbes. La llegada de precipitaciones incrementa el riesgo de colapso del deteriorado sistema de agua y alcantarillado y obliga a la población a almacenar agua potable en recipientes que, finalmente, se convierten en criaderos de zancudos.
Al respecto, el decano del Colegio de Médicos de Piura, Jorge Espinoza, dijo a Norte Sostenible que, de surgir un escenario lluvioso, los contagios de dengue se podrían incrementar en 10 días. “Con el incremento de las lluvias, los criaderos se crean en todas partes, hasta una tapa de gaseosa podría servir como criadero de zancudos que transmiten el dengue”, precisó.
Por su parte, el médico Julio Barrena, especialista en salud pública, alertó que a partir de la semana 12 ó 13 los casos aumentarían, es decir, a partir de la tercera o cuarta semana de marzo, cuando miles de estudiantes de la región retornen a clases.
La llegada de precipitaciones incrementa el riesgo de colapso del deteriorado sistema de agua y alcantarillado y obliga a la población a almacenar agua potable.
Pero la preocupación de los especialistas coincide en Sullana y Paita como dos provincias donde, históricamente, se presenta alta incidencia de casos. Ambas zonas presentan grandes brechas en el acceso al agua potable: los habitantes deben cargar agua en baldes o esperar la cisterna para recibir el recurso. “Los factores de alza de casos de dengue son socioeconómicos, es decir, tenemos que almacenar agua ya que no tenemos las 24 horas. Y falta educación en la población, sobre la correcta manera de almacenar agua potable”, señaló José Rivas Añazco, del Hospital de Apoyo II-2 de Sullana.
En el caso de Paita la situación es similar. “Paita tiene la particularidad de tener poca agua potable, entonces la población nos vemos obligados a almacenar agua limpia, que es donde se reproduce el vector del dengue. Es decir, hay poca disponibilidad de agua potable de manera diaria en Paita”, explicó Víctor Merino, del hospital Las Mercedes de Paita.
Baja cobertura de vacunación contra el dengue
Una de las medidas para frenar los casos de dengue es la aplicación de la vacuna a población vulnerable de 10 a 16 años. La medida fue implementada en noviembre del año pasado por el Ministerio de Salud en las regiones priorizadas de Piura, Tumbes, Loreto y Ucayali. Son dos dosis que se aplican con un intervalo de tres meses. Sin embargo, la estrategia no ha obtenido el resultado esperado.
Según Julio Barrena, miembro del Colegio Médico de Piura, desde diciembre hasta la fecha, la vacunación contra el dengue solo ha alcanzado el 52% de su cobertura, cuando debería estar en más del 85%. Es decir, de los 106,047 niños programados, se han vacunado apenas 55,139, solo con la primera dosis.
A nivel de provincias, Zarumilla (Tumbes) registra la más alta cobertura de vacunación, con un 92,5%; le sigue Maynas (Loreto) con 66,9%; en tercer lugar está Sullana (PIura), con 53,5%; Talara con 53,3%, Piura con 51,5%, y la provincia de Tumbes con el 28%.
Uno de los principales frenos para la vacunación, explicó Barrena, es el miedo a las inmunizaciones, un temor infundado resultado de la pandemia. “Hay cierto temor y dudas sobre la vacunación, sobre todo, cuando se tratan de vacunas nuevas. Por eso es importante que se implemente una mejor estrategia de comunicación con la ciudadanía’’, recomendó el especialista.
Además de la baja vacunación, a los especialistas les preocupa la deficiente infraestructura sanitaria en la región y la falta de recursos humanos. En Piura se necesitan 4,943 médicos para cubrir las necesidades de toda la población; pero en la actualidad solo contamos con 2,394, es decir, existe una brecha de 2,549 profesionales a nivel regional, de acuerdo con el decano del Colegio de Médicos de Piura, Jorge Espinoza.
