La “megaobra” de pistas y veredas y el drenaje pluvial del centro Piura también ha sido observada por la Contraloría. Una comisión de control, que realizó una visita entre el 23 de septiembre y el 24 de noviembre, halló una situación adversa que compromete directamente el avance de los trabajos, en un contexto donde ciudadanos y comerciantes han denunciado la ejecución de las obras sin planificación y causándoles graves perjuicios económicos.
En el documento remitido al Gobierno Regional, el órgano de control alertó que la empresa contratista Corporación Diamante JUBERS SAC presenta demoras significativas en la entrega de los expedientes de adicionales, lo que podría desencadenar en la paralización parcial o total de los trabajos.
“Demora, por parte del contratista, en la presentación de los expedientes técnicos o prestaciones adicionales de las obras, producto de las interferencias advertidas durante la ejecución de las mismas, genera el riesgo de dilación del plazo contractual, así como suspensiones o paralizaciones durante la ejecución de las obras, afectando la continuidad de la misma, en perjuicio de la población beneficiaria”, señala el Informe de Visita de Control 102-2025-OCI.
La observación se sustenta en la verificación realizada el 18 de noviembre de 2025, donde la Contraloría detectó que la empresa aún no presenta expedientes complementarios vinculados a interferencias del sistema eléctrico y de telecomunicaciones, tanto aéreo como subterráneo, ni los documentos técnicos para la reubicación de postes y pozos a tierra.
Según el documento, la entidad supervisora solicitó formalmente el 10 de noviembre la presentación de estas prestaciones adicionales, pero a la fecha del informe “no han sido alcanzadas a la Entidad, a pesar del vencimiento del plazo normativo”. Esta demora pone en riesgo el cronograma de ejecución en obras que resultan estratégicas de cara al período de lluvias. Más aún cuando el residente de obra del drenaje renunció hace unas semanas.
Expediente deficiente y observaciones
El órgano de control advierte además que los retrasos no solo afectan la programación general, sino que podrían interrumpir por completo las actividades constructivas debido a la imposibilidad de intervenir áreas que presentan interferencias no resueltas. La falta de expedientes técnicos actualizados limita la capacidad del Gobierno Regional para supervisar, aprobar o reprogramar acciones en campo, lo que incrementa el riesgo de perjuicio para la ciudadanía, particularmente en zonas altamente vulnerables a inundaciones, señala el documento.
Además, la Contraloría enfatiza que estas carencias fueron advertidas en visitas previas y que el contratista fue informado oportunamente sobre la necesidad de subsanar estos aspectos. Asimismo, el documento advierte la urgencia de evitar que la situación adversa se traduzca en mayores demoras o en un impacto económico para el presupuesto público. Por ello, se solicitó al Gobierno Regional adoptar acciones inmediatas y comunicar los correctivos en un plazo máximo de cinco días hábiles.
En paralelo, a diario cientos de emprendedores denuncian que, debido a las pistas destrozadas y el lento avance de los trabajos, vienen sufriendo pérdidas económicas irreparables, sobre todo en época navideña. Por otro lado, vecinos del centro se oponen a la instalación de un estanque de tormentas debajo de la Plazuela Tres Culturas, considerada patrimonio cultural de la ciudad.
