El presupuesto de las obras para el mejoramiento de pistas, veredas y drenaje pluvial del Centro Histórico de Piura, adjudicadas por más de S/ 110 millones, seguirá incrementándose debido a varias deficiencias en los expedientes técnicos. Así lo comprobamos tras acceder a los cuadernos de obra de ambos proyectos anhelados por los piuranos, pero que ahora en plena ejecución presentan más riesgos, que constituyen adicionales y ampliaciones de plazo.
Ambas obras fueron adjudicadas por el Gobierno Regional de Piura al Consorcio Diamante JUBERS SAC, una empresa con sede en Áncash y con pésimos antecedentes. El 23 de septiembre fue la fecha de inicio de ambos proyectos, pero en el caso del drenaje pluvial se suspendió el plazo de inicio contractual debido a la renuncia del jefe de supervisión.
Por ese motivo, mediante la resolución gerencial 188-2025 Gobierno Regional de Piura, se aprobó la suspensión de plazo de ejecución de obra y se acordó reiniciar el 02 de octubre. A la fecha, según el portal de Inviertepe, la obra presenta un retraso de 6,20%: tiene un avance de 0,22%; pero debería estar en 6,42%.
La nueva fecha de culminación, acordada tras la primera suspensión de plazo, es el 20 de abril del 2026. Sin embargo, el término de la obra es incierto, pues la contratista ha solicitado un adicional y ampliación de plazo por interferencias halladas en el subsuelo que no estaban consideradas en el expediente técnico.

Adicionales y ampliaciones de plazo
Solo dos semanas después de haber iniciado la obra de pistas y drenaje, los ingenieros residentes de obra Javier Santos Albines (pistas y veredas) y Óscar Pozo (drenaje pluvial) anotaron el 15 de octubre en los cuadernos de obra la existencia de interferencias que no estaban contempladas en el expediente técnico. Estas se refieren a conexiones de Enosa, telefonía, etc.
Unas semanas después, el 29 de octubre Santos Albines solicita a la supervisión una primera ampliación de plazo; y el 5 de noviembre anota en el cuaderno de obra la solicitud de un primer adicional, debido a las interferencias subterráneas. Cinco días después, el 10 de noviembre, el residente Pozo también solicita el primer adicional para la obra del drenaje.


Pero los hallazgos no terminan allí: el 15 de noviembre el residente Santos Albines anota en el cuaderno de obra “el riesgo de encontrar estructuras durante el proceso de excavación y/o demolición no consideradas en el expediente técnico”. Es decir: la posibilidad de más adicionales y ampliaciones de plazo, originados por un expediente técnico incompleto y deficiente.
Cabe destacar que la obra de pistas y veredas del Centro Histórico de Piura tiene un plazo de ejecución de 540 días calendario. El inicio de la obra ha causado indignación y malestar en residentes y empresarios de la zona, que han denunciado pérdidas millonarias por causa de obra no planificada y ejecutada sin criterios técnicos.
Al respecto, Fernando Casanova, abogado de la JUVECO Tres Culturas del Centro Histórico, dijo que es demasiado sospechoso que “a menos de un mes de iniciada la obra se solicite ampliación de plazo y adicionales. Y los riesgos continúan. Lo grave es que el Gobierno Regional de Piura no ha contestado a las consultas del residente de obra”, indicó.